España, primera potencia europea en reproducción humana asistida y tercera del mundo
- Se sitúa a la cabeza en Europa por número de clínicas y ciclos (156.865 ciclos en 2014).
- En España, aproximadamente el 3 por ciento de los nacimientos son consecuencia de las técnicas de reproducción asistida.
- 15.000 parejas viajan cada año a nuestro país en busca de tratamientos de reproducción asistida, que se ofrecen en 41 hospitales públicos y 197 centros privados. La aportación del sector privado es clave para satisfacer la demanda existente en España y fuera de nuestras fronteras.
Madrid, 20 de julio de 2017.- España recibe casi un 40% del turismo relativo a la reproducción asistida, de acuerdo con la Asociación Nacional para Problemas de Fertilidad (ASPROIN). “En una sociedad como la europea, con tasas de fertilidad bajas y una edad para la maternidad muy elevada, todavía existen numerosas cuestiones no resueltas en torno a la reproducción asistida que generan gran controversia, pero nuestro país cuenta con 238 clínicas y hospitales que ofrecen técnicas de reproducción asistida (41 públicos y 197 privados), lo que convierte a España en la primera potencia europea en reproducción humana asistida por número de clínicas y ciclos (156.865 ciclos en 2014 según la Sociedad Española de Fertilidad – SEF-)”. Así lo ha señalado Luis Mayero, presidente del Instituto para el Desarrollo e Integración de la Sanidad (Fundación IDIS), durante el Congreso Mejicano de Medicina de la Reproducción que se celebra en ese país del 17 al 20 de julio.
Víctor Saúl Vital Reyes, miembro del comité organizador del congreso y a su vez colaborador de la clínica de reproducción asistida del Grupo HLA inaugurada el pasado mes de octubre por el consejero de ASISA, Luis Mayero, ha resaltado “el gran potencial y prestigio que la reproducción asistida tiene en España, hasta tal punto que trasciende sus fronteras siendo un país de referencia científica, clínica y asistencial en esta materia”.
Tal es así que la mayor parte del turismo de salud vinculado al área de reproducción asistida acude a España debido a que en sus países la legislación no permite la fecundación in vitro asistida en algunos casos, como es el de las madres solteras o las parejas homosexuales. Además, estos tratamientos son mucho más económicos en nuestro país, que cuenta con un servicio envidiable de atención médica post tratamiento. Sin embargo, “la situación en España es realmente complicada, ya que coinciden tendencias sociales comunes en todo el mundo occidental con pobres ayudas por parte de la Administración”, ha matizado Luis Mayero. En nuestro país se destina a prestaciones sociofamiliares el 1,5% del producto interior bruto (PIB), mientras que la cifra media europea es del 2,3%, y en los países nórdicos este valor oscila entre el 3,2% y el 4,2%.
Por otro lado, el porcentaje financiado por el Estado a los pacientes en España se queda en un 25%. Finlandia, Austria, Holanda o Bélgica están entre el 80 y el 90% de cobertura. Noruega y Portugal, en el 70%. Alemania, en el 65 %. Y Francia, en el 100%. La Seguridad Social proporciona tres intentos de FIV para las parejas que no pueden tener hijos y solo lo cubre a mujeres hasta los 38 años.
En el ámbito de la Sanidad privada en España, el asegurado puede someterse al tratamiento en caso de que sufra algún problema reproductivo o de esterilidad. La mayoría de compañías incluyen dentro de la cobertura el estudio y la realización de las pruebas necesarias para determinar cuál es el diagnóstico. Además, en el caso de que la pareja sufra un problema relacionado con la fertilidad, el seguro proporcionará al asegurado los tratamientos incluidos en la póliza (generalmente franquiciados).
“La aportación de la sanidad privada -que utilizan cerca de 10 millones de personas en nuestro país- en el área de la medicina reproductiva es, a la vista de los datos, clave para satisfacer la demanda existente en nuestro país y en los de nuestro entorno”, ha señalado el presidente de IDIS, a la vez que ha destacado la apuesta del sector privado por la calidad de la asistencia -con la creación de la Acreditación Quality Healthcare (QH)- y la publicación de los resultados de salud (estudio RESA), iniciativas ambas iniciativas encaminadas a la mejora de los tratamientos y de la calidad de vida de los pacientes.