Actualmente nuestro país invierte un 6,2% del PIB en sanidad, una inversión que para el presidente de la Fundación IDIS “es insuficiente. Es importante hacer un esfuerzo en financiación para que el sistema tenga los recursos que necesita para prestar asistencia y para lograr una accesibilidad adecuada”. “En el sistema que necesitamos -puntualizó- se han de encontrar nuevas fórmulas de colaboración público-privadas basadas en la continuidad asistencial entre ambos sectores y siempre en beneficio del paciente. Esta suma de esfuerzos entre el sector público y privado debe ir más allá de las listas de espera porque si algo ha demostrado la pandemia es que para atender las necesidades de toda la población el sector público por sí solo no es suficiente”.

Durante el debate se abordó la dependencia en mayores, la calidad asistencial, la eficiencia o la importancia de llevar a cabo una transformación digital del sistema sanitario dado que, como se expuso, la medicina está íntimamente ligada a la innovación. Se plantea así el reto de idear modelos asistenciales novedosos apoyados en la telemedicina y la medicina predictiva y de precisión, entre otros. Por ello, Juan Abarca abogó “por hacer un pacto por la innovación para que todo el mundo pueda acceder a los últimos avances tecnológicos, independientemente de su ámbito público o privado; un modelo en el que ambos sistemas puedan beneficiarse de la alta tecnología y ofrecer un mejor servicio a los pacientes”.